Desde que el diseñador Jeremy Scott entrase en Moschino, la casa italiana ha dado un vuelco pop, irreverente e infantil a sus colecciones. El último hecho que confirma esta regla es un perfume en en forma de osito de peluche.
Moschino Toy (98 €) es el nombre de la susudicha fragancia, un clásico teddy bear con una camiseta que reza «Esto no es un juguete de Moschino», un guiño a una obra surrealista de René Magritte.
Empaquetado como un juguete, la eau de toilette sigue la estela de las últimas colecciones de Scott que este otoño tiene como protagonistas al personaje de dibujos animados Bob Esponja y al imaginario de la cadena de comida rápida McDonald’s.
Un cambio de rumbo que le funciona a la firma, cuya identidad antes de la entrada en 2013 del diseñador estadounidense se encontraba diluida. Este otoño sus piezas ancladas en los citados hits de la cultura de masas se han visto reproducidos en cientos de editoriales de moda.
En su colección para la próxima primavera, presentada el pasado mes de septiembre, volvió a homenajear al consumismo infantil de los noventa con una particular visión del universo de la muñeca Barbie.
Tendremos que esperar hasta febrero para cerciorarnos de si a la moda le sigue gustando la línea inspirada en la cultura de masas de Scott. Por el momento, su osito de perfume se postula como un súper ventas de la inminente Navidad.
Imágenes: D.R.
