El accesorio abandona su fuerte carácter simbólico configurando una nueva fórmula. Decimos adiós a su larga vida ligado al luto para reinterpretar su uso como complemento atemporal según dicta la tendencia.
Las colecciones de alta costura de Chanel y Giambattista Valli han devuelto a la pieza la elegancia retro que lo envuelve.
Definimos el nuevo manual de uso:
– Esencia effortless. Menos es más. Vestidos de líneas rectas o desenfadados vaqueros serán los perfectos compañeros de complemento.
– Belleza minimalista. Apuesta por un maquillaje nude de inspiración sixties profundizando la mirada con un eyeliner efecto cat eye. Para la noche, aplica color a los labios en tonos rojizos.
– Juego de texturas. Su infinidad de formas, colores y tejidos configura la pieza como un imprescindible en cualquier armario. Algunas, como la modelo Joan Smalls, la bloguera Chiara Ferragni o la editora Anna Dello Russo, suscriben la tendencia.
Imágenes: L’Estrop, D.R.