La nueva realeza, aquellas figuras que acompañan a los herederos, pero por las que no corre sangre azul, han renovado las reglas de la aristocracia.
Aportan una visión más funcional al estilo de palacio que empieza por su guardarropa. Desde sus primeras apariciones públicas junto al actual monarca, Letizia abogaba por la moda democrática, llevando a su armario prendas de grandes cadenas como Massimo Dutti.
Su ejemplo lo han seguido otras consortes como Mary Donaldson en Dinamarca, que asistía este mes a la Cena de gala en el Palacio de Amalienborg con motivo de la Cumbre de la Moda Sostenible en Copenhague vestida de H&M.
Incluso esta tendencia ha llegado a Windsor. Kate Middleton es también una defensora de la ropa low cost. La vimos en su gira por India con una maleta que incluía piezas de Topshop y Zara. Y ha sido la Duquesa de Cambridge la que ha sorprendido en una de sus más sonadas apariciones públicas. Para celebrar el 90 cumpleaños de la Reina Isabel II vistió un abrigo de Zara en rojo. ¿El efecto? La prenda se agotaba en cuestión de horas.
Imágenes: Cordon press.
