Una inversión moderada que consigue un cambio de estilo superlativo. Quizá ese haya sido el motivo que ha mantenido a flote este accesorio al alza desde 2016, cuando Prada lo integró en su colección de o-i para vestir el día.
Desde entonces se ha versionado en mútiples tejidos y anchuras, hasta llegar a esta primavera visto desde el vinilo de Tibi o los de algodon de Jonathan Simkhai. Pero cómo llevarlo para que la pieza marque una dirección valiosa en el look.
Esta temporada se superpone a la blazer de oficina o al traje completo en una apuesta por actualizar el look sastre.
La camisa blanca siempre es un gran aliado del corsé. El juego funciona con vaquero o con pantalones de cuero rectos a partes iguales.
Por supuesto, la camiseta oversize ama ser abrazada por este complemento. Mantén el contraste de texturas para llevar el estilo al máximo.
Imágenes: Instagram.