Soho House comenzó, en 1995, como un club privado para perfiles creativos. Hoy la membresía se amplía a ciudadanos que compartan intereses a través de hoteles, restaurantes y espacios de ocio. Descubrimos en Estambul el último establecimiento en unirse a la familia que próximamente tendrá una sede en Barcelona.
En un decimonónico Palazzo Corpi, situado en el barrio de Beyoğlu, se instala la que podría definirse como la hermandad de la industria creativa. Este club, al que tienen preferencia de acceso sus socios (bajo inscripción y dos invitaciones) salvo que queden habitaciones libres, cuenta con hotel, sala de dibujo, de juegos, restaurantes, bares, spa y gimnasio.
Desde espacios discretos concebidos para dormir, hasta un gran apartamento, existe fórmulas para todos los gustos que permiten pernoctar o vivir en Soho House.
Para alimentar el paladar de sus huéspedes, encontramos una terraza con vistas en la que se sirve comida turca y mediterránea y una extensa carta de cócteles locales, como el Raki Fizz, con los que disfrutar del atardecer en la ciudad.
Pero quien se adentre tras sus puertas, tendrá que armarse de fuerza para visitar la ciudad. Su hamman tradicional engancha y cuenta espacio para manicura, pedicura, barbero y tratamientos corporales exquisitos.
También existen espacios de esta casa reservados únicamente para miembros. Salones y bares en los que cerrar negocios o simplemente tomar una copa entre amigos.
En el Embassy Club, la música de das se prolonga hasta altas horas de la noche.
Imágenes: © Soho House.