Ha acaparado flashes en la última edición de Cannes, este mes es la portada de una de las revistas de estilo de referencia y es la protagonista de una serie de éxito en EE.UU. Para Jane Fonda, los años cotizan al alza. Con 77 años, es además embajadora del gigante de belleza L’Oreal y un absoluto icono de estilo.
Desde que protagonizó Barbarella en 1968 e impulsó la moda space age, Jane se convirtió en uno de los iconos de la época.
En los setenta cambió su imagen de sexbom por una faceta activista. De hecho, sus detractores la apodaron «Hanoi Jane», por su implicación contra la guerra de Vietnam y el establishment.
Fue en el 71, cuando actuó en la película Klute y cambió su corte de pelo por un shag que se convertiría en el peinado más demandado en los salones.
Ya en la década de los ochenta dio un giro a su carrera para convertirse en la gurú del aeobic. Mayas, bodies y calentadores brillantes y a todo color que supusieron otro hito en la forma de vestir de la época, que hoy reeditan firmas como American Apparel.
Volviendo a la actualidad, Fonda es una de las abanderadas del movimiento advanced style, que han creado un nuevo espacio de inspiración constituido por mujeres septuagenarias en adelante. Una prueba de que el estilo maduro es tendencia.
Imágenes: Instagram.