Entre los múltiples beneficios del yoga, puede que no hubieses pensado que puede ayudarte a solucionar el malestar de las alergias de la temporada. Algunas de las posturas de esta disciplina hacen circular la sangre a los senos paranasales y abren así las cavidades de las fosas, aliviando la obstrucción que causa las molestias.
Pero has de tener en cuenta que para que la ecuación surta efecto es esencial poner el foco en la respiración: inhalar profundamente y exhalar por la nariz. La teoría del Yoga afirma que la respiración equilibrada puede ser un beneficio y que proporciona equilibrio en el sistema nervioso simpático y parasimpático.
Estas son cinco posturas que te ayudarán a acabar con la congestión:
Sarvangasana: esta postura se basa en apoyar el cuerpo en el cuello, hombros y antebrazos. Según B.K.S. Iyengar, autor del libro “Yoga: The Path to Holistic Health”, esta pose puede ayudar a aliviar los síntomas de los bloqueos sinusales. Para realizarla acuéstate boca arriba, dobla las rodillas y levanta los pies por encima de tu cabeza para que los hombros y el cuello sean quienes soporten el peso. Después, coloca las palmas de tus manos en la espalda baja y los antebrazos al lado de las caderas. Levanta las piernas hacia el techo, tratando de tocar el techo con los pies y mantén la mirada hacia arriba, para proteger el cuello. Esta postura hay que realizarla durante 20 segundos.
Adho Mukha Svanasana: es una postura de yoga de brazos invertidos que hace que el flujo sanguíneo vaya hacia los senos paranasales y así pueda ayudar a respirar sin problema. Para realizarla coloca las manos, directamente debajo de los hombros, y rodillas, asegurándote que estén en línea con las caderas, sobre una esterilla. Presiona las palmas según vas moviendo las caderas y la espalda, estira las piernas y extiende los talones hacia la estera de yoga. Tu cuerpo se queda entonces con una simulación de la letra V al revés.
Uttanasana: se realiza de pie, frente a una esterilla de yoga, intentando doblar el torso hasta que entre en contacto con los muslos. Separa las piernas al ancho de la cadera dejando los pies paralelos entre sí, dobla las rodillas y deja que tus manos lleguen al suelo. Sigue doblando las rodillas para que las caderas apunten hacia el techo. Ayuda a aliviar los síntomas de la descongestión ya que al doblar el cuerpo hacia adelante señala la atención del sistema inmune de los senos.
Danurasana: esta postura ayuda a abrir el cuello y pecho para ayudar a mejorar la respiración. Llevala a cabo acostándote boca abajo, inhalando y flexionando las rodillas mientras llevas los pies hacia los glúteos. Sujeta los tobillos con las manos y estira la columna poco a poco mientras elevas las caderas. Mantén los hombros, piernas y el torso en el suelo.
Tadasana: ayuda a corregir la postura, prevenir hernias y puede mejorar el equilibrio y ayudar a aliviar la congestión. Se trata de poner los pies juntos y la espalda recta, descender el sacro y posicionar la pelvis en vertical. Mientras tanto hay que extender los brazos a los costados del cuerpo y enderezar la barbilla, para que quede paralela al suelo.
Imágenes: @kinoyoga.