Destierra la idea de recurrir a las conservas cuando no hay nada en la nevera. La comida enlatada se ha colgado la etiqueta gourmet y salta de las estanterías de los mercados más sibaritas de Europa a restaurantes que giran en torno a ellas. A partir de ahora, las tapas se sirven en lata
Tincan en Londres, expone sus latas como piezas de diseño y nutre sus estanterías de las
mejores conservas traídas de todo el mundo. Maiden Lane, en el East Village de Nueva
York, hace gala de la procedencia española y portuguesa de la mayor parte de sus
productos: la versión más hipster del porvo galego.
En España, una de las pioneras fue Catrineta, en Santiago de Compostela. Este proyecto
de dos jóvenes empresarios quiso cuidar tanto la calidad como el diseño de su producto
desde el principio y hoy es una de las principale referencias independientes de conservas
en nuestro país.
LataBarra, en Barcelona, ofrece hasta 24 variedades de conservas
procedentes de La Belle Iloise, en la Bretaña francesa. ¿Lo mejor? Puedes llevarte tu plato favorito ¡a casa!
Imágenes: D.R.
