Cuando los tejidos acumulan grasa localizada y la celulitis se vuelve persistente, recuperar la silueta requiere de ayuda experta. La dieta y ejercicio son los suplementos de un tratamiento que se realiza infiltrado. La medicina estética propone soluciones para en poco más de media hora (en cada una de las sesiones) devolver la tersura, reducir el contorno o alisar perfiles. Los expertos del Instituto Médico Láser nos desvelan las claves de las técnicas más demandadas.
Aqualix: reductor
Se trata de infiltrar una sustancia con efecto detergente directa a las células grasas. El efecto conduce a la reducción del espesor la zona. Solo es efectiva cuando la cantidad a disolver es medio o bajo.
Frecuencia: Entre 2 y 4 sesiones cada tres semanas.
Carboxiterapia: alisa, define y reduce
Esta técnica combate de una vez celulitis, flacidez y grasa. A través de infiltraciones de dióxido de carbono, se provoca una producción de produciendo colágeno que frena la producción de celulitis y activa la circulación de la zona.
Frecuencia: unas 15 sesiones 2 ó 3 veces por semana.
Mesoterapia: anticelulítico.
Es uno de los tratamientos clásicos de la medicina estética. Se introducen con una aguja un cóctel de sustancias en pequeñas dosis mediante múltiples inyecciones. Consiguen reactivar la circulación, mejorando la superficie cutánea y borrando la celulitis.
Frecuencia: 10 sesiones, una por semana.
Imágenes:@irinashayk