La impronta de Stephen Alesch y Robie Standefer, de Roman & Williams, pone el sello el segundo establecimiento de Freehand. Un híbrido entre hostal y hotel que, tras su apertura en Miami, inaugura nueva sede. Esta vez en Chicago.
Ubicado en la zona norte de la ciudad, Freehand apuesta por un ecléctico diseño donde elementos coloniales e indígenas comparten espacio con piezas contemporáneas en un edificio art-deco de los años 20 rehabilitado. Objetos especiales y hechos a medida que cuentan la historia de la zona.
Las habitaciones en sus dos formatos (individuales o la versión compartida) continúan la línea estética del hotel. Pinceladas retro en un entorno urbano y con todas las comodidades para hacer sentir a los huéspedes como en casa.
Su oferta se completa con dos opciones gastro. The broken Shaker, una apuesta segura para las veladas nocturnas, y Café Integral, especialistas en comidas locales y café de Nicaragua.
Imágenes: D.R.