Las apuestas fallaron. Ni Erdem, Alexander McQueen, Roland Mouret o Ralph & Russo. La Duquesa de Sussex sorprendió con una pieza de Givenchy firmada por Clare Waight Keller. Como ha comentado la diseñadora al portal ITV, Meghan tenía «una idea muy clara» de lo que quería segun comentó la diseñadora la mañana después de la boda y han «trabajado de forma muy cercana en el diseño.
Sketches of The Duchess of Sussex’s #RoyalWedding dress, designed by Clare Waight Keller, have been released.
The Duchess and Ms. Waight Keller worked closely together on the design, epitomising a timeless minimal elegance referencing the codes of the iconic House of Givenchy. pic.twitter.com/A9ZFKVZmUz
— Kensington Palace (@KensingtonRoyal) 20 de mayo de 2018
Keller ha manifestado que quería capturar la «esencia moderna y fresca» de la hasta ahora actriz y que se «sintiera absolutamente increíble en el vestido». El resultado final fue un traje con cuello bargo y mangas tres cuartos, cintura esculpida y una enagua de seda de tres capas de organza.
El segundo vestido que llevó la recién casada para la recepción de Frogmore House fue creado por Stella McCartney, que ya había sonado como candidata. «Estoy muy orgullosa y honrada de haber sido elegida por la Duquesa de Sussex y representar al diseño británico. Fue uno de los momentos más importantes de mi carrera y estoy orgullosa de todo el equipo», comentó Stella McCartney al diario WWD.
Imágenes: Cordon press.