Las colecciones crucero y pre-fall son un recurso que funciona en caja y cada vez son más los diseñadores que se suman a ellas.
Más llevables que las líneas clásicas, Chanel, Dior, Balenciaga, Miu Miu o más recientemente Louis Vuitton, con Nicolas Ghesquière al frente, ven en estas propuestas la materialización de su nombre en el mercado.
Presentadas fuera del calendario oficial, consiguen perdurar en la memoria lejos de las largas y saturadas jornadas de las semanas de la moda. Sobre todo si se presentan en desfiles con historia como los concebidos por Karl Lagerfeld o Raf Simmons. Aunque cuando el diseño se defiende por sí mismo, no es necesaria la puesta en escena para sorprender.
Aquí nuestros favoritos:
Juego de estampados de Proenza Schouler
Estética ‘Sixties’ de Gucci
El reinado de las pieles de Fendi
Imágenes: D.R.